La calabaza, lo malo y lo feo zarparon en Oregón en la regata anual de calabazas del estado en Tualatin.
Organizada desde 2004, en la carrera de remo los competidores se disfrazan como personajes de Elvis o un hot dog, Guy Fieri y un repartidor de UPS, y se lanzan al agua en una calabaza que han cultivado.
Los concursantes pasan la mañana tallando su calabaza para prepararla para el agua. Cuantas más entrañas se extraen, más ligera se vuelve la calabaza, lo que le da a su capitán una ventaja competitiva al permitirle viajar más rápido.
Las calabazas se cultivan localmente, a menudo por los mismos agricultores que compiten en la carrera. Cuando se le preguntó qué se necesita para cultivar una calabaza enorme, un competidor compartió su sencilla receta para el éxito: “Buenas semillas, buena tierra, buena suerte, trabajo duro”.
