El hombre que disparó e hirió gravemente al primer ministro eslovaco, Robert Fico, en un ataque el año pasado ha sido condenado a 21 años de prisión tras ser declarado culpable de terrorismo.
Juraj Cintula, un jubilado de 72 años, disparó cinco tiros contra el primer ministro en mayo de 2024 cuando estaba de visita en Handlova, a unos 180 kilómetros (112 millas) de la capital, Bratislava.
El pistolero disparó a Fico a muy corta distancia, justo cuando éste se disponía a estrecharle la mano, pensando que era un partidario.
En el tribunal, Cintula negó haber intentado matar al primer ministro y dijo que había apuntado deliberadamente lejos de sus órganos vitales.
Las imágenes del lugar del tiroteo mostraron a un hombre levantando un arma y disparando contra el primer ministro antes de ser sometido por guardaespaldas. Otros miembros del equipo de seguridad de Fico se apresuraron a subir al primer ministro a su coche.
Resultó gravemente herido en el abdomen y fue trasladado en helicóptero a un hospital cercano para ser operado, y su estado se describió como potencialmente mortal.
El atacante, un poeta aficionado de unos 70 años, afirmó que sólo quería herir a Fico para detener las políticas que creía que estaban dañando a Eslovaquia.
El primer ministro ha tratado de culpar a la oposición por el ataque y por avivar el odio, aunque él mismo es conocido por su retórica profundamente divisiva.
Cintula fue condenada por cargos de terrorismo, y el juez Igor Kralik declaró: “El tribunal considera probado que el acusado no atacó a un ciudadano sino específicamente al Primer Ministro”.
El abogado del pistolero había intentado reducir el cargo al de atentado a funcionario público, que tiene una pena menor, pero el juez lo rechazó.
El abogado de Cintula dijo que probablemente apelaría el veredicto.