Sonia Bermúdez salió satisfecha de la sala de prensa del Gamla Ullevi de Göteborg. Con una sonrisa tranquila y la serenidad de quien sabe que el plan va tomando forma, la seleccionadora atendió a los medios tras sellar el pase —con triunfo incluido— a la final de la UEFA Women’s Nations League, la segunda consecutiva para España y la segunda en apenas cuatro meses.
“Estamos contentos con el trabajo del equipo”empezó. “Hemos podido estar más espesas, pero estamos contentas con el cómputo general: cinco goles a favor, ninguno en contra. Nos habría gustado ser más profundas; ha habido momentos donde nos ha costado un poco máspero el equipo ha estado muy armado. No hemos estado tan fluidas en fase ofensiva, pero es una semifinal de Nations, estaban jugando en casa… Aun así, estoy contenta porque el equipo se ha adaptado a las circunstancias”.
En Göteborg, la selección no solo confirmó su billete a la final; también reforzó la confianza de un grupo que quiere crecer bajo su mando. Bermúdez insistió en que el éxito es coral, compartido y fruto de una idea que el vestuario ha asumido con convicción. “Confiamos en todas las futbolistas, si no, no estarían aquí”, subrayó. “Se están adaptando a nuestra filosofía de juego y a nuestros mensajes. Pasar a una final no es fácil, queríamos ganar. Cuando sales de casa, el rival —la tercera mejor del mundo— te puede hacer daño. Estamos felices con el debut de Clara Serrajordi, que ha debutado con 17 años”.
La seleccionadora también tuvo palabras para la protagonista y MVP del partido, Alexia Putellas, autora del único gol en Göteborg y líder de la selección. “Alexia se está adaptando a su nuevo rol. Está para sumar, muy positiva, haciendo goles… No se lo demandamos, pero estamos contentos con su trabajo en esa posición. La vemos bien”.
Con la serenidad de quien conoce la exigencia del camino, Bermúdez se marchó satisfecha. España no solo volvió a ganar: volvió a competir como un equipo grande. Y lo hizo en un estadio que ya forma parte de la historia















