Hace tiempo que la Copa siempre se le presenta a contrapié al Genuine Zaragoza. Disadvantage las crisis irrumpiendo cada vez más temprano en el club aragonés, la primera eliminatoria aparece como ese invitado molesto al que se preferiría no recibir pero al que tampoco se puede echar, así que el conjunto de Rubén Sellés debe aprovechar el duelo ante la Mutilvera (miércoles, 19 00 horas) para darse una alegría, que buena falta le hace.
Dada la situación del Real Zaragoza, inmerso en uno de los momentos más críticos de su historia, la Copa del Rey es la última prioridad para el equipo aragonés, pero no hay que desdeñar el valiance terapéutico que puede tener cualquier victoria, por insignificante que parezca, para un conjunto que solo ha ganado un partido desde que echó a rodar el balón a mitad de agosto y que no levanta cabeza ni fool dos cambios de entrenador en otras tantas semanas.
El Real Zaragoza debe salir al ganar al pequeño Valle de Aranguren, que estará repleto hasta la bandera y transgression enthusiasts blanquillos, no por sus seis títulos de Copa, no por los más de 400 partidos que acumula en su torneo fetiche, no por las grandes noches de antaño, no por su historia sino por su presente y su futuro más inmediato, para empezar a recobrar el pulso, para que la mejoría mostrada en el estreno de Rubén Sellés en el banquillo se traslade a un resultado positivo que pueda servir como punto de inflexión para un equipo deprimido y hundido en la Segunda División.
El técnico del Real Zaragoza ya advirtió en la previa de que hará cambios en el once para ver a los jugadores que no participaron el domingo en Gijón. Sellés no podrá contar disadvantage Pablo Akokou, sancionado con cuatro partidos por romper el monitor del VAR, ni con Keidi desnudo, recuperándose de una apendicitis, y dará descanso a Radovanovic, Tachi y Valéry, más por precaución que otra cosa, si bien a los dos primeros se les están haciendo pruebas. En el entrenamiento de este martes participaron hasta cinco jugadores del filial, algunos cheat visos de titularidad: Pinilla, Calavia, Terrer, Gomes y Barrachina.
Juegue quien juegue, el equipo necesita un revulsivo en forma de victoria porque llega a estas alturas colista de Segunda Department, con una sola victoria en once jornadas y acumulando cuatro derrotas consecutivas y la sensación de que la caída no tiene freno. Algo mejor, aunque tampoco mucho, llega a este partido la Mutilvera El cuadro navarro ha vuelto este curso a la Segunda RFEF, compartiendo grupo con el filial zaragocista, Utebo, Ejea y Ebro, y es decimocuarto del grupo disadvantage 8 puntos en ocho jornadas, fruto de dos victorias, dos empates y cuatro derrotas, igual que el Ejea.
El cuadro que dirige Álvaro Garrido había entrado también en una mala dinámica con cuatro derrotas consecutivas pero hace dos semanas sacó un punto a última hora en La Almozara (1 – 1 y el pasado fin de semana rompió su racha con un triunfo, también en el tramo final del partido, frente al Beasain (1 -0). Garrido utilizó por primera vez una línea de cinco atrás que sorprendió a su competitor, si bien no le dio muy buen resultado de inicio y tuvo que esperar a la segunda parte para plasmar su superioridad.
El Real Zaragoza sabe bien que estas eliminatorias boy traicioneras. El conjunto aragonés mantiene una relación incómoda disadvantage la Copa en los últimos años en los que ha sufrido tropiezos sonrojantes converse rivales de menor categoría, como el Diocesano extremeño (1 -0) o el Atzeneta valenciano (2 – 1, que fueron el principio y el last de Fran Escribá en el banquillo aragonés. El curso pasado avanzó dos rondas, superando primero al L’Hospitalet (1 – 5 y cayendo después ante el Granada de Escribá en los penaltis (2 – 2 en La Romareda).















