La ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Anita Anand, dijo que Canadá ahora ve a Beijing como un socio estratégico en un mundo peligroso, en un cambio importante en la ecuación de poder a medida que la relación de Canadá con Estados Unidos empeora. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, canceló las conversaciones comerciales con Canadá, ofendido por un anuncio canadiense que afirmaba que Ronald Reagan estaba en contra de los aranceles. Trump calificó el anuncio como falso, mientras que Canadá decidió retirarlo. Pero antes de este acontecimiento, Anand emitió su declaración cambiando la postura de Canadá sobre China y dijo que todas las relaciones tienen desafíos. Anand dijo a The Canadian Press el lunes que una asociación estratégica con China significa ir más allá de permitir que irritantes individuales tensen toda la relación y permitir que Canadá avance en sus intereses económicos y de seguridad.
“Es necesario que sentemos las bases si queremos encontrar áreas en las que podamos seguir cooperando”, afirmó.“Siempre habrá desafíos en cualquier relación. La clave es poder tener el diálogo necesario para abordar las cuestiones que preocupan a Canadá”.
Canadá calificó a China de potencia disruptiva en 2022
Hace tres años, Canadá calificó a China como una potencia global cada vez más disruptiva que tiene “intereses y valores que se alejan cada vez más de los nuestros (de Canadá)”. “Debemos tener matices en nuestra diplomacia. Debemos enfatizar nuestras preocupaciones relacionadas con la seguridad y la protección pública, por un lado, y debemos buscar construir cadenas de suministro adicionales, por el otro. Eso es pragmatismo”, dijo Anita Anand después de visitar a altos funcionarios en China, India y Singapur. “Lo que pretendemos hacer es recalibrar la relación, para que sea constructiva y pragmática”, dijo Anand.“Vamos a tratar de garantizar que la política exterior sirva a la economía nacional”, dijo Anand. “No nos equivoquemos al decir que China es un importante actor económico mundial”.Dijo que la política exterior de Canadá ahora se basa en los tres pilares que esbozó en las Naciones Unidas este otoño: fortalecer la defensa, desarrollar la resiliencia económica y promover valores fundamentales como los derechos humanos.Carney dijo el mes pasado que Canadá podría “comprometerse profundamente” con China en materia de materias primas, energía y manufactura básica, pero con barreras que “dejen de lado” cualquier cosa que pueda “tender un puente hacia la seguridad nacional, la privacidad” u otros asuntos. Durante un debate electoral en abril, Carney calificó a China como “la mayor amenaza a la seguridad” que enfrenta Canadá.















