Cuando Zohran Mamdani irrumpió en Gracie Mansion en una fría noche de noviembre de 2025, los neoyorquinos aplaudieron el ascenso de un progresista local. Pero en línea persiste una silenciosa confusión: ¿nació en Nueva York o en algún lugar de Estados Unidos?La respuesta no es simple ni simbólica. Y es precisamente por eso que importa.
El récord oficial
Zohran Kwame Mamdani nació en Kampala, Uganda, en 1991. Se mudó a los Estados Unidos con sus padres cuando era niño y creció en Manhattan, asistiendo a escuelas públicas de Nueva York antes de estudiar en el Bowdoin College de Maine. Su madre es la aclamada cineasta Mira Nair, conocida por Monsoon Wedding y The Namesake, y su padre es Mahmood Mamdani, un teórico político ugandés-indio y profesor de la Universidad de Columbia.En términos simples, Mamdani es un ciudadano estadounidense naturalizado nacido en Uganda. Se crió en Nueva York, pero no nació allí. Es un pequeño detalle burocrático con enormes implicaciones políticas en un país que a menudo trata el lugar de nacimiento como una medida de pertenencia.
La barrera de la primogenitura
Debido a que nació fuera de Estados Unidos, Mamdani tiene prohibido constitucionalmente postularse para presidente. El artículo II de la Constitución de Estados Unidos limita la presidencia a ciudadanos “natos”. Los estadounidenses naturalizados, independientemente de sus logros o de su profunda identidad cívica, están permanentemente excluidos.Entonces, si bien Mamdani puede convertirse en el primer alcalde musulmán de la ciudad de Nueva York (y potencialmente en senador o miembro del gabinete), la Casa Blanca está legalmente fuera de su alcance.Este hecho da forma sutilmente a la narrativa pública que lo rodea. Cuando los comentaristas lo describen como “el próximo Obama”, otros rápidamente les recuerdan que no puede seguir el mismo camino político. La ironía es aguda: el heredero retórico de Obama no es elegible para heredar el cargo.
Creciendo en Nueva York
Sin embargo, si su nacimiento le impidió llegar a la presidencia, su educación lo vinculó íntimamente al tejido de Nueva York. Su familia se instaló en el Upper West Side cuando él aún era un niño. Absorbió el humanismo cinematográfico de su madre, la tradición académica radical de su padre y la política cambiante de la ciudad a través de la crisis, la protesta y la reinvención.Mamdani dijo una vez que “se enamoró de Nueva York antes de entender Estados Unidos”. Esa tensión define su política. Su visión del mundo proviene de los sindicatos de inquilinos, las protestas de los taxistas y las marchas de solidaridad con Palestina, no de las mitologías fundadoras de Estados Unidos. Sus discursos no citan a Jefferson; citan a Jay-Z.
La paradoja de los inmigrantes
El nacimiento de Mamdani en Uganda lo ubica en un nuevo linaje político estadounidense: los hijos de inmigrantes que se convierten en voces morales en la vida pública. Al igual que Ilhan Omar y Pramila Jayapal, canaliza la claridad de un extraño hacia las instituciones del interior.Pero también lo hace vulnerable a viejos patrones de sospecha. Su lugar de nacimiento, para algunos críticos, se convierte en una abreviatura de extranjería. Los partidarios lo enfatizan como prueba de que Estados Unidos se renueva a través de la migración. Ambos exageran.Lo que importa no es dónde nació, sino lo que representa: una versión de Estados Unidos donde la identidad inmigrante no es un obstáculo para el poder.
El simbolismo del origen.
Si el lugar de nacimiento de Obama se convirtió en un campo de batalla de conspiraciones, el lugar de nacimiento de Mamdani se ha convertido en un espejo más sutil de la política identitaria. Los hechos son indiscutibles (nació en el extranjero), pero la ansiedad en torno a la pertenencia ha cambiado. A los neoyorquinos no les importaba. Lo vieron como uno de los suyos.Nueva York define la identidad de manera diferente: no por el certificado de nacimiento sino por los recibos de alquiler, los viajes en metro y la cadencia del habla. Los documentos de Mamdani pueden decir “naturalizado”, pero su ritmo es inequívocamente neoyorquino.
La política del lugar de nacimiento
La política nacional, sin embargo, es menos indulgente. Estados Unidos ha utilizado durante mucho tiempo la geografía para establecer los límites de la legitimidad. Un político de Scranton puede presumir de autenticidad. A un político de Kampala, por muy arraigado que esté en Nueva York, a menudo se le tacha de “global”.Esta tensión explica por qué Mamdani genera tanto admiración como alarma. Para los liberales, representa un futuro inclusivo e internacionalista. Para los críticos, encarna la izquierda cosmopolita y extranjera que temen esté reemplazando las narrativas tradicionales.
El resultado final
Entonces, ¿Zohran Mamdani nació en Nueva York o en Estados Unidos?No.Nació en Uganda, creció en Nueva York y se formó políticamente en el Bronx y Queens.Es ciudadano por ley, neoyorquino de corazón y estadounidense por elección.Ese detalle (Kampala en lugar de Queens) podría excluirlo de la presidencia. Pero también lo libera de desempeñar el papel del político universal prescrito. No tiene que representar a todo Estados Unidos. Sólo le queda representar la ciudad que le formó.












