La policía de Praga acusó de fraude a dos hombres que, según ellos, vendieron bonos de emisión emitidos por sus empresas constructoras entre 2015 y 2020, pero luego no pagaron a los compradores las cantidades invertidas.

Los daños ascendieron a más de 360 ​​millones de coronas, según informó hoy el portavoz de la policía de Praga, Jan Rybanský, en el sitio web de la policía. Según él, la pareja se enfrenta a hasta diez años de prisión si son declarados culpables.

Financiaron sus caprichos

Según los criminólogos, los hombres defraudaron a 535 personas que compraron bonos en la República Checa y Eslovaquia y les enviaron importantes sumas de dinero.

“El dinero no sólo se utilizó para el funcionamiento del grupo y la posible construcción de proyectos, sino que en parte se desvió en beneficio del responsable del grupo y de sus allegados para financiar sus necesidades vitales y sus aficiones.” dijo el portavoz. Según él, las empresas no llevaban cuentas, por lo que no salió a la luz la verdadera situación económica del grupo.

“Según las conclusiones de los criminólogos, se trataba del llamado esquema Ponzi”, dijo Rybanský. Es una operación de inversión fraudulenta que promete altos rendimientos, pero en lugar de beneficios reales, paga a los inversores anteriores supuestos rendimientos sobre el dinero de los nuevos inversores entrantes hasta que el sistema colapsa por falta de nuevos depósitos.

Un administrador de una morgue vendió restos humanos: los

Estalló cuando debían pagar los intereses.

Según la policía, uno de los hombres dirigía una empresa de construcción fundada en 2007 y al menos otras 70 filiales.

La segunda persona ocupaba el cargo de órgano estatutario de empresas individuales. Al principio se dedicaban mucho a construir y vender casas. Construyeron con éxito en Herink, Dolní Jirčany y Jesenice. Las actividades de las empresas fueron financiadas por bancos y posteriormente por bonos, que estaban cubiertos por el valor de los inmuebles propiedad del grupo.

“Todo funcionó como debería, hasta antes de 2015, cuando se produjeron pagos regulares de intereses o reembolsos del principal”, dijo un portavoz de la policía. En aquel momento, según él, se produjo un punto de inflexión en la situación financiera del grupo y al año siguiente algunas de las filiales del grupo estaban sobreendeudadas. Por lo tanto, los hombres emitieron bonos adicionales, que ya eran fraudulentos.

Vídeo: Invertir en bonos presentación comercial

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