La empresa anti-drones ya ha subido más de un 400 por ciento en bolsa este año

La empresa con sede en Sydney se fundó en 2014 para responder al papel cada vez mayor de los drones en los conflictos militares. La nueva empresa cuenta ahora con más de 400 empleados en Australia y Estados Unidos y, debido a la gran demanda de Europa, también están trabajando en una oficina europea.

Droneshield desarrolla sistemas portátiles y fijos para proteger instalaciones militares, aeropuertos y otros lugares sensibles contra amenazas de drones.

Esto incluye las ‘pistolas de drones’: armas de ciencia ficción que no disparan balas, sino señales que hacen que los drones sean incontrolables y con las que puedes eliminarlos del aire sin sufrir daños.

Especialmente desde la guerra en Ucrania, en la que los drones desempeñan un papel crucial, la demanda de productos Droneshield se ha disparado. En junio, la empresa anunció que un país europeo había comprado equipos por valor de 62 millones de dólares australianos (34 millones de euros), el mayor pedido desde la fundación de la empresa.

La explosión de la demanda hace que el precio de las acciones de Droneshield aumente drásticamente. Desde principios de este año, la proporción ha aumentado más del 400 por ciento.